A lo largo de nuestra vida, solemos tener la mala costumbre de odiar muchas cosas, personas, actitudes, mujeres, hombres, programas, situaciones y hasta canciones.. podemos odiar MUCHO y de forma indiscriminada.. ¿pero odiar cosas de nosotros mismos?..
Odio mi facilidad de encontrar cosas en mi para odiar..
Odio mi ingenuidad ante las cosas..
Odio mi incapacidad para hablar ante muchas personas..
Odio mi inseguridad..
Odio que al primer momento de ponerme mis zapatos o sandalias, me los pongo al revés..
Odio que me despeine con facilidad..
Odio llorar por cualquier cosa..
Odio no poder contar chistes de forma graciosa..
Odio mi falta de habilidad para enfrentar las cosas...
Y así son tantas cosas...
..Pero sin duda lo que mas odio, es la capacidad, estupidez e ingenuidad de dar excesivamente de mi a las personas.. así éstas no lo merezcan.. pensar y hacer cosas por los demás, que ni en un millón de años se les ocurriría hacer por mi.. odio querer a las personas de una forma, en que no solo me sale del corazón cumplirles con ciertas actitudes o demostrar mi cariño con detalles.. si no que me desvivo cegadamente por ellos..ya sea amistades, amores.... y sinceramente, uno piensa, ¿será que existirá alguien que de el doble por mi que lo que yo doy por ellos?
..Madre me dice, que uno tiene que vivir con esa situación, que no muchos harán lo mismo que uno hace por ellos, y que ademas, hay que hacer las cosas, demostrar amor y cariño sin pensar en lo que recibimos.. pero como que uno siempre tiene la esperanza de recibir algo mas.. pero con el tiempo se van desbaratando.. y tal vez, ella tenga razón.. pero como uno quisiera poder decidir por quien damos tanto y quien no..de no darnos la remota mala vida y acudir a la indiferencia, o al menos igualar las actitudes de cada quien..
..Pero ni modo, supongo que esto es otra cosa con la que debemos lidiar en nuestras vidas...
